De ruta por la historia y cocina de Toledo

Cervantes, Dumas o Galdós, entre otros escritores ilustres, afilaron sus plumas para ensalzar los sabores de la cocina toledana.

Las recetas que inspiraron a grandes literatos siguen conquistando paladares siglos después, dando valor a un refrán que ya desde el siglo XV elogiaba los fogones locales: “A quien Dios quiso bien, en Toledo le dio de comer”.

Siguiendo aquellos ecos, su cocina moderna “se ha reinventado a partir de la tradición, los productos locales y un patrimonio único”, como apunta su alcaldesa, Milagros Tolón.

Por razones como estas, la denominada “ciudad de las tres culturas” se alzó en 2016 como Capital Española de la Gastronomía.

El galardón coincide con dos importantes efemérides: el 30 aniversario de su declaración como Ciudad Patrimonio de la Humanidad por parte de la Unesco y el cuarto centenario de la muerte de Miguel de Cervantes, que residió en la ciudad en varias etapas de su vida.

Desde Seguros RGA os invitamos a sumaros a esta ruta virtual por la historia y los sabores de Toledo, que aúna una «creativa combinación entre patrimonio, cultura y gastronomía», según resaltó el jurado del CEG 2016, organizado por la Federación Española de Periodistas y Escritores de Turismo (Fepet) y la Federación Española de Hostelería (FEHR).

Para iniciar este viaje por la ciudad castellano-manchega puede ayudarte la aplicación iToledo, con la que podrás navegar por las leyendas de la nueva capital de la gastronomía geolocalizadas con noticias y fotos antiguas.

Estas fábulas te llevarán hasta el casco antiguo, la Catedral, el Alcázar de Toledo o la sinagoga Santa María La Blanca, monumentos que se encuentran entre los 20 rincones imprescindibles para visitar en la ciudad castellano-manchega.

Junto a su rico patrimonio histórico y cultural, merece capítulo propio la gastronomía de la ciudad donde se ‘horneó’ el primer tratado de cocina en castellano en 1529: el Libro de Guisados, obra de Ruperto de Nola.

La cocina toledana: sencillez e ingenio

La cocina de Toledo, un “gozoso ensamblaje entre sencillez, la de sus productos, y elevación, el ingenio de sus gentes”, comparte ciertas similitudes con El Quijote, “donde se funde el alma del pueblo llano con una cultura elevada. No podía ser de otra manera, ya que precisamente por la humildad del grueso de su despensa, la cocina toledana exige altas dosis de ingenio y de habilidad para, de esta forma, sacar lo mejor de cada producto y acertar en las armonías gustativas”, explicaba el dossier de su candidatura a Capital Española de la Gastronomía, apoyada por reconocidos chefs.

La gastronomía de la ciudad es afamada por sus asados, calderetas y guisos, entre éstos, el pisto o el gazpacho manchegos. Además, la caza protagoniza conocidos platos típicos de Toledo como la perdiz toledana o el venado.

Es muy popular además su repostería: los mazapanes cuentan con Indicación Geográfica Protegida.

Los sabores de siempre se reinventan con su cocina de vanguardia, que sin duda marida a la perfección con los caldos de la tierra. Dos tienen denominación de origen: los vinos de La Mancha y de Méntrida.

No hay que olvidar los quesos manchegos, un entrante delicioso para comenzar esta ruta por una tierra que, como bien señalaba José Amador de los Ríos, “guarda en su seno todos los recuerdos, todas las tradiciones de España”.

Lee más sobre Toledo y su grastronomía en el blog de Globalcaja.